EN DEFENSA DE LAS SEVILLANAS Y LAS RUMBAS

Donde late la Marisma, allá donde Sevilla le da el testigo a Huelva, a finales de los ochenta ese bello rincón vio como cuatro voces se unieron en una sola, y que mejor nombre para bautizarlos que el del lugar que los vio nacer y crecer “Hinojos”, o lo que es lo mismo, pentagramas de guitarras por sevillanas para cantar rezando a la Virgen del Rocío, a Huelva, al Conquero, a la Virgen de la Cinta, a Sevilla, a la Marisma. La primera actuación importante del grupo Hinojos fue en el año mil novecientos noventa en la discoteca Laraña de Hinojos con motivo de la presentación del primer trabajo discográfico titulado “Porque te quiero Rocío”, disco grabado a finales del año mil novecientos ochenta y nueve. Con anterioridad, Hinojos ya había actuado en distintos escenarios como la Aldea del Rocío, llegaron incluso a desplazarse a Madrid. Para el año mil novecientos noventa y uno llegará “Rocío es…”, o lo que es lo mismo, el segundo trabajo discográfico. A partir de aquí se abrirá un par

Allá, cerca de dónde nace el Guadalquivir, en un mágico rincón jienense llamado Andújar, allá parece que se traslada la ribera sevillana. El cante se hace puro y añejo, el tiempo parece haberse detenido, vuelven las tradiciones de antaño, o simplemente no se fueron. Las sevillanas en Andújar llevan su vestido de siempre, el más cotidiano, aquel con el que se sintieron verdaderamente a gusto, con el que se siguen sintiendo verdaderamente a gusto. Ecos de Sierra Morena, nos dejan estas bellas sensaciones en su trabajo para la primavera de dos mil diecisiete titulado "Sueños Nuevos", unos Sueños Nuevos con los que podemos viajar a los Sueños de nuestros antepasados. De Ecos de Sierra Morena, puedo decir que son unos verdaderos pregoneros y defensores de nuestras tradiciones, estamos ante un trabajo con el que se pueden identificar aquellos que se definen como puristas del género, sus componentes derrochan humildad, solera, amor a las viejas costumbres en cada uno de sus tema

Me marcho a mi Onuba, sí mi Onuba, porqué así es como lo siento, y lo hago para hablar de un Gran Artista, aparte de un Gran Artista, un Gran Amigo, una de esas personas que una gran Señora llamada Vida, y un Gran Señor llamado Destino te ponen en el camino, me refiero al Onubense Andrés Pérez Parra​. Me va a costar trabajo escribir sobre ti después de esta gran amistad que ha surgido entre nosotros. De Andrés tengo que decir que es un Gran Autor, un Gran Compositor, y aparte, que tiene una voz que engancha a aquel que lo escucha, lo que se puede decir un Artista muy Completo. Andrés Pérez Parra, nace en Huelva en el seno de una familia humilde, nos encontramos ante un luchador nato al que la vida le ha puesto alguna que otra piedra en el camino, piedras que siempre supo esquivar. Durante muchos años se dedicó a la docencia como profesor de Educación Física, y al deporte, practicando el baloncesto y posteriormente como entrenador. Pero la pasión de Andrés era el cante, todo lo que